Los fofulápices son una forma más económica de tener un fofucho personalizado, eso sí, no es posible añadirles tantos detalles como a uno convencional, pues miden solo 10 cm de alto. La ventaja: que lo puedes acoplar a cualquier boli o lápiz y cambiarlo cuando éstos de gasten.
Este es un fofulápiz para una niña:
Este para una nazareno:
Si te gusta la Semana Santa, no te pierdas los fofuchos de
mantilla,
hombre de trono y
músico (forma en la que en Málaga llamamos a los portadores), ni los
broches de fieltro dedicados a esta fiesta. Todos (a excepción del fofulápiz) se pueden personalizar con el estandarte de la cofradía a la que pertenezcan.
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